Resultados de Citología Cervical en Mujeres menores de 25 años, San Cristóbal, 2008-2011 (página 2)
Existen aspectos polémicos tales como: el momento
óptimo o ideal para la detección de la neoplasia de
cuello de útero y a qué grupos de edad deben estar
dirigido los programas de detección selectiva
citológico. El hecho es que el tiempo para la
transformación de carcinoma in situ a
cáncer invasor es variable. Esto se debe a que algunas
pacientes pueden realizar esta transición en un plazo
más breve "queman etapas" dependiendo fundamente de la
cepa oncogénica de HPV. Otro aspecto importante es la
observación en la práctica especializada
ginecológica de casos con este tipo de tumor en edades
tempranas, los reportes recientes de cáncer cervicouterino
en jóvenes y adolescentes, en mujeres jóvenes
durante el embarazo, y por otro, los reportes recientes que
vinculan las transformaciones fisiológicas del
cérvix durante la adolescencia, los cuales facilitan que
el HPV (de cepas oncogénicas) se adquiera e instale,
promoviendo la atípica celular en este tejido (35,
36).
Se conoce que las células de la vagina y el
cérvix son más susceptibles a la infección
en la niña y la joven. Estas células y el medio
vaginal van a sufrir cambios durante la adolescencia, los cuales
provocan que al final de ese período exista una mayor
resistencia a las infecciones. Esto hace que las adolescentes,
sobre todo en los estadios más precoces, tengan mayor
riesgo de contraer una ITS que una mujer adulta cuando tiene
relaciones sexuales con un hombre infestado (18).
Tabla IV: Edad ginecológica y
resultados de citología cervicouterina.
Altamente significativo la
asociación entre las Edad Ginecológica y resultados
de citología cervicouterina
*El por ciento calculado es respecto los
casos que resultaron positivos y el total según edad
ginecológica.
La tabla IV expone por sí misma el efecto nocivo
de la precocidad de las relaciones sexuales copulativas sin
protección en las mujeres pues en la medida que disminuye
la edad ginecológica en las primeras relaciones sexuales
aumenta el riesgo de presentar lesiones premalignas
cervicouterina, correspondiendo con toda la bibliografía
consultada al respecto, aunque se relacionan con la edad de
comienzo de las relaciones y no con la edad ginecológica,
pero se infieren similares resultados. Para reducir las
posibilidades de cáncer de cuello uterino, las
adolescentes deben evitar la actividad sexual o utilizar condones
siempre.
Muchos autores reconocen que hasta cumplidos los 5
años de edad ginecológica, el epitelio
estratificado plano no recubre y protege el cérvix,
demostrando un incremento del riesgo mientras más precoz
las relaciones sexuales, hechos que se manifiestan en nuestro
trabajo donde se precisa una disminución de la
proporción en cuanto aumenta el período entre la
menarquia y las relaciones sexuales (19, 37).
Martínez Pinillo y colaboradores plantean que en
Cuba también está ocurriendo un cambio en la edad
de aparición de este tipo de tumor posiblemente
relacionado con la precocidad de las primeras relaciones
sexuales, la promiscuidad y la concomitancia de otros factores de
riesgo, tales como historia de abortos repetidos e infecciones
ginecológicas en mujeres sexualmente activas
(29).
TABLA V: Número de parejas y
resultados de citología cervicouterino.
Altamente significativo la
asociación entre las número de parejas sexuales y
los resultados de citología cervicouterina
La tabla V representa la relación directamente
proporcional entre ambas variables, es decir a mayor
número de parejas sexuales mayor riesgo de presentar
lesiones cervicales de lo anterior se reconoce que en nuestro
grupo de estudio la mayoría ha mantenido entre 4 y 7
parejas sexuales, analizando que se trata de mujeres menores de
25 años es un dato significativo. Un apartado precisa la
confirmación de jóvenes que en su corta vida han
mantenido sexo con más de 10 parejas, algunas más
de 15, hechos que no miden pero si dan una idea bastante fiel de
la conducta sexual en nuestros jóvenes y los peligros en
que se encuentran, aun mayor considerándolos el relevo del
mañana inmediato.
Múltiples autores coinciden con reconocer a la
promiscuidad como factor de riesgo primordial en el desarrollo
del cáncer cervicouterino, relacionado también con
la transmisión de enfermedades y conflictos psicosociales.
Para reducir más el riesgo de cáncer de cuello
uterino, la mujer debe limitar su número de
compañeros sexuales y evitar los compañeros
promiscuos (22, 26, 27, 38, 39).
TABLA VI: Antecedentes de ITS en
pacientes con citología cervicouterina
alterada.
Altamente significativo la asociación entre las
ITS y los resultados de citología
cervicouterina
*: El porciento está basado en el número
de pacientes según diagnóstico de la
citología.
Se tiene en cuenta la presencia de infecciones de
transmisión sexual en la tabla VI observando que el mayor
número de las pacientes presentó 2 ó
más infecciones, dentro de ellas el virus HPV y la
Moniliasis exhibieron porcientos significativos con 99.28% y
48.25% respectivamente.
Las ITS han permanecido durante varias décadas
entre las primeras cinco causas de solicitud de atención
médica por los adultos en países en vías de
desarrollo. En países en vías de desarrollo tanto
la incidencia como prevalencia de ITS se mantienen muy altas y
representan la segunda causa de vida sana perdida en mujeres de
15 a 45 años de edad después de las causas
maternas. Reconociendo desde la anterior tabla que el grupo de
resultados citológicos cervicouterinos positivos mantuvo
una frecuencia mayor de parejas sexuales, es fácil
conociendo el riesgo de inferir que este grupo también
presenta mayor frecuencia de antecedentes y presencia de
enfermedades de transmisión sexual (28, 38).
Las infecciones de transmisión sexual
continúan siendo un importante problema de salud
pública a escala mundial. Constituyen la principal causa
de morbilidad con consecuencias considerables para la salud, lo
social y lo económico. Los índices de infecciones
de transmisión sexual están aumentando en algunas
regiones, especialmente en el rango etáreo de 15 a 25
años. La mejor manera de tratar la propagación de
las infecciones sigue siendo difícil de abordar. La
prevalencia de la infección por VPH se caracteriza en
América Latina por un primer pico cercano a 25-30% antes
de los 25 años, representando infecciones recientes. Esta
prevalencia decrece con la edad pero en varios estudios en esta
región se ha observado un segundo pico en mayores de 55
años lo cual podría ser explicado por el
comportamiento sexual de las mujeres o de sus compañeros,
un efecto de cohorte o la reactivación de infecciones
latentes. Se ha demostrado asociación entre persistencia
viral y respuesta disminuida a estimulación de linfocitos
en mayores de 45 años, sugiriendo la posibilidad de
alteraciones inmunológicas como explicación del
segundo pico de prevalencia (39, 40).
TABLA VII: Resultados colposcópicos en
pacientes con citología cervicouterina
Citología | Colposcopia (EBA (+)) | |||||
Negativo | Leucoplasia Mosaico Base | |||||
NIC I (62 | 56 | 5 | 1 | – | 6 | |
NIC II (38) | 15 | 5 | 14 | 4 | 23 | |
NIC III (32) | – | 14 | 10 | 8 | 32 | |
C. in situ (11) | – | 4 | 4 | 3 | 11 | |
Total (143) | 71 | 28 | 29 | 15 | 72 |
Como se demuestra en la tabla VII la lesión
más frecuente es el epitelio blanco al ácido
manifestado por leucoplasias, mosaiquismo y base, con 71 casos
colposcópicamente negativo, para recoger estos datos nos
valimos de las tarjetas de citología cervical
después del concurso de un especialista en la materia en
diferentes centros asistenciales.
Los resultados se comportan de manera similar a otros
estudios publicados quienes muestran elevado relación
entre citologías positivas y EBA (+) (16, 41,
42).
La colposcopia es el proceder que complementa la
citología orgánica, utilizando como recurso el test
de Schiller o uso del ácido acético al 3 %,
comprobando alteraciones dentro del estroma vascular en el
espacio intercapilar, color y textura en el epitelio
dañado. Una adecuada evaluación
colposcópica, requiere la visualización completa de
la zona de transición y la lesión en estudio, la
impresión diagnóstica colposcópica es tan
precisa como la relación cito-histológica,
según Berkowitz, la colposcopia ofrece un 90 % de
efectividad (18).
TABLA VIII: Relación entre
resultados citológicos y ponche de cuello.
Citología | Ponche cervical | |||||
Negativo NIC I NIC II NIC III C. situ | ||||||
NIC I | 6 | 49 | 7 | – | – | 62 |
NIC II | 2 | 8 | 26 | 2 | – | 38 |
NIC III | – | 2 | 9 | 18 | 3 | 32 |
C.Situ | – | – | 4 | 2 | 5 | 11 |
Total | 8 | 59 | 46 | 22 | 8 | 143 |
Demostrando la relación directa entre
citología de Papanicolaou y ponche o biopsia del
cérvix, se muestra la tabla VIII. En todos los casos se
mantuvo la misma conducta que rige el P.N.D.P.C.C.U. Los casos
con citologías positivas se le realizaron en consulta de
patología de cuello uterino colposcopia y biopsia por
ponche, demostrando que más del 90 % de los casos a los
que se le realizaron biopsia por ponche guardan estrecha
relación con el resultado de la citología. La
citología orgánica cervical constituye un proceder
diagnóstico de vital importancia, en la detección
precoz de las lesiones cervicales, siempre que se realice con la
técnica y el personal preparado al respecto (43,
44).
En la actualidad, la citología cervical se
considera como la única manera de reducir la incidencia de
cáncer cervical. Sin embargo, esto ha sido efectivo
sólo en países desarrollados, dado que la
existencia de una infraestructura sanitaria confiable es un
requisito previo de este enfoque (15, 16). Es muy importante para
lograr el éxito de cualquier programa de tamizaje contar
con la capacidad de identificar, llegar y tamizar a una
población definida (OMS) (9).
Hay dos maneras de prevenir el cáncer cervical:
la primera es prevenir las infecciones con VPH y la segunda es
hacerse regularmente el examen de Papanicolaou para detectar las
afecciones precancerosas y el VPH, ya que ambas pueden tratarse
para detener la progresión hacia un cáncer cervical
(12).
El examen de Papanicolaou consiste en la
obtención de un cepillado o raspado de células del
cuello uterino, el cual se pone en una laminilla portaobjetos de
laboratorio. Esta muestra se toma por lo general durante un
examen pélvico, aunque no todo examen pélvico
incluye un frotis de Papanicolau. La mujer debe consultar a su
médico o enfermera si se realizó el frotis de
Papanicolau, saber cuándo se realizó por
última vez y cuándo debe hacerlo de nuevo. El
frotis de Papanicolaou no es doloroso, aunque pueden presentarse
uno o dos segundos de incomodidad para algunas mujeres cuando se
toca el cuello uterino (19).
El frotis de Papanicolau es muy efectivo para detectar
cambios precancerosos del cuello uterino, pero parte de su
efectividad depende de que se lo realice regularmente porque, con
frecuencia, uno sólo no mostrará ninguna
célula anormal aún ante la existencia de una
displasia o cáncer. Si el cuello uterino parece anormal,
por ejemplo, un frotis con resultado normal no debe ser
considerado suficiente. Si el resultado del frotis de
Papanicolaou sugiere una displasia o si la apariencia del cuello
uterino es anormal, por lo general el examen del cuello uterino
se realiza con lentes de aumento (colposcopia) y se toman
biopsias. Estos pequeños fragmentos de tejido cervical,
examinados en el laboratorio, pueden mostrar si existen signos de
lesión precancerosa o de cáncer. Los
pre-cánceres son totalmente curables cuando se les hace el
seguimiento apropiado. La supervivencia de los casos de CIS y
aún de los microinvasivos es muy cercana al 100%. Pero las
posibilidades de supervivencia después de 5 años
descienden significativamente si el cáncer logra avanzar a
los tejidos circundantes, la vejiga, el recto y a otros sitios
distantes (12, 15).
Para reducir las posibilidades de cáncer de
cuello uterino, las niñas menores de 18 años de
edad deben evitar la actividad sexual o utilizar condones
siempre. La infección con VPH produce verrugas genitales
que pueden ser escasamente visibles o de varias pulgadas de
diámetro .Si una mujer ve verrugas en los genitales de su
compañero sexual debe evitar la relación sexual.
Para reducir más el riesgo de cáncer de cuello
uterino, la mujer debe limitar su número de
compañeros sexuales, evitar los compañeros
promiscuos y suspender el consumo de cigarrillo. Los condones
pueden ayudar a evitar la transmisión del VPH. El examen
ginecológico anual, con frotis de Papanicolaou, debe
comenzar cuando la mujer inicia su actividad sexual o a
más tardar a los 20 años, aún si no se tiene
una vida sexual activa. Todo hallazgo anormal debe ir seguido de
una colposcopia y biopsia. Se han desarrollado vacunas contra el
VPH y se están probando, pero es muy pronto para saber si
dichas vacunas ayudarán a reducir el riesgo de
cáncer cervical (32, 44).
Conclusiones
En nuestro universo aproximadamente la quinta parte de
las féminas menores de 25 años presentan lesiones
cervicouterinas, las cuales se observan desde los 15 años
de edad y cronológicamente van ganando en intensidad y
frecuencia. El comienzo precoz de las relaciones sexuales
copulativas y la presencia del HPV inciden directamente en la
génesis de las lesiones premalignas cervicouterinas.
Existe relación directa entre los resultados
citológicos cervicales y las biopsias por
ponche.
Recomendaciones
Extender el universo de estudio del Programa
Nacional de Detección Precoz del Cáncer
Cervicouterino a la mujer con vida sexual activa desde sus
inicios.Desarrollar un programa de propaganda e
instrucción dentro de los adolescentes en los centros
educacionales y de recreación, demostrando la
importancia de la prevención y el diagnóstico
precoz de las lesiones premalignas cervicouterinasFomentar en las consultas de planificación
familiar el uso de los métodos de barrera
(condón), realizando una acción educativa sobre
los padres y adolescentes.
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Anexos
12.1. Anexo I
Instrumento
Nombre y Apellidos,
_________________________________________
Edad___________, Menarquia ____________, E, civil
______________
Escolaridad__________________, H.
Obstétrica___________________
Antecedente de ITS, cual.
_____________________________________
Antecedentes Familiares de
CCU_______________________________
Número de parejas sexuales,
__________________________________
Método anticonceptivo utilizado,
________________________________
Resultado de citología cervical.
_________________________________
Colposcopia,
____________________-___________________________
Biopsia (ponche),
____________________________________________
12.2. Anexo II
CONSENTIMIENTO INFORMADO
Yo, _________________________________ y en uso de mis
facultades, libre y voluntariamente, declaro que he sido
debidamente informado por el investigador principal acerca del
procedimiento a seguir en la investigación.
He recibido información verbal durante la
entrevista sobre la naturaleza, propósitos, beneficios, y
alternativas de esta investigación, así como de los
medios con los que se cuenta para realizarla y otorgo mi
consentimiento para formar parte de la muestra de dicha
investigación.
Conozco mi derecho de revocar mi consentimiento en el
momento que yo lo considere.
Dado a los ______ días del mes de
________________ de 2011
_________________________
Nombre y Apellidos
12.3. Anexo III
Autor:
Dr. Ernesto Rodríguez
Báez.
Especialista de I grado en
Ginecología y Obstetricia.
Profesor Instructor. Hospital General
Docente Comandante Pinares. San Cristóbal, Artemisa,
Cuba.
Dr. Ronald Ramírez
Sánchez.
Especialista de I grado en
Ginecología y Obstetricia.
Máster en Atención Integral a
la Mujer. Profesor Instructor. Hospital General Docente
Comandante Pinares. San Cristóbal, Artemisa,
Cuba.
Dra. Yoarbis Hernandez
Arbola.
Doctora en Estomatología. Profesor
Instructor.
Hospital General Docente Comandante
Pinares. San Cristóbal, Artemisa, Cuba.
Lic. Daimy Delgado Avila
Licenciada en Educación Especialidad
Lengua Inglesa
Profesora Auxiliar en la Filial de Ciencias
Medicas: Manuel Piti Fajardo, San Cristóbal, Artemisa,
Cuba.
Dr. Stuart Fernando Muela
Galiano.
Residente de 1er Año en Medicina
General Integral.
Policlínico: Camilo Cienfuegos, San
Cristóbal, Artemisa, Cuba.
Fecha de envío: 05.03.2013
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